jueves, 9 de febrero de 2012

Frigyes Karinthy: Viaje en torno a mi cráneo


Título original: Utazás a koponyám körül
Idioma original: húngaro
Año de publicación: 1937
Valoración: muy recomendable

Frigyes Karinthy (1887-1938) fue poeta, periodista, novelista y traductor (ahí es nada), un firme defensor del esperanto (aunque nunca llegó a hablarlo) y el primero que propuso la teoría de los seis grados de separación. Además, fue el padre de Gábor (que llegaría a ser un conocido poeta) y Ferenc Karinthy (cuya obra Metrópolis reseñamos aquí).

Entre las muchas obras que escribió destaca ésta, que describe de forma novelada lo que vivió desde que descubrió que tenía un tumor cerebral hasta que fue operado en Estocolmo. Así, Karinthy comienza su novela situándonos en el momento en el que experimenta los primeros síntomas de su dolencia –escuchando asombrado el sonido de un tren que sólo él puede oír– y desarrolla su obra a través de lo que él siente, lo que le dicen sus allegados –que su letra se vuelve indescifrable por momentos, por ejemplo, algo que él no es capaz de percibir– y del sinfín de médicos que visita y las interminables e innumerables pruebas médicas de las que es objeto.

Lo curioso de este libro es que en ningún momento el autor teme por su muerte ni se encuentra preocupado por el tumor que amenaza su existencia (lo que, obviamente, sería lo normal). Más bien al contrario, Karinthy describe todo lo que le ocurre con una increíble serenidad, como si la persona que tuviera el tumor fuera otra. Así, muestra una gran curiosidad y un incansable deseo de conocer –y, sobre todo, entender– lo que le ocurre, lo que le hacen y las consecuencias que todo ello puede tener en su salud.

Gracias a esa distancia, nos encontramos ante un libro que tiene mucho de científico y poco de sentimental, pero también ante una obra excelentemente escrita, con pasajes llenos de la ironía que también habita en sus otros trabajos. Aunque en ocasiones se enreda en digresiones más extensas de lo necesario, en mi opinión, es éste sin duda un libro que puede enseñarnos mucho sobre uno de los mejores autores del siglo pasado y, a su vez, de lo mucho que ha avanzado la medicina desde entonces.

1 comentario:

Enrique Hormigos dijo...

Avances de lo más útiles a la hora de fulminar a cualquier miembro del triste club de Cualquier Tiempo Pasado Fue Mejor.

Que hace un par de semanas leí la descripción de una mastectomía perpetrada, sin anestésia, en el siglo XVIII a una mujer entre seis doctores y un serrucho, y daban ganas de salir corriendo.

El libro tiene muy buena pinta, y además veo que lo han reeditado hace poco.

Gracias por la recomendación.